Muchos aficionados que participan en la Semana Internacional coinciden en que debería estudiarse un posible cambio de fechas

En las últimas ediciones el concurso de la Semana Internacional de la trucha venía siendo patrimonio de lo pescadores leoneses, en la que fina lizaba el pasado sábado el primer puesto lo conseguía con todo merecimiento un palentino, Aurelio Fernández Herrero. Tras él se colocaban Víctor Maestre Lozano y Jesús Picón Fernández. Un pescador francés, Jean Philipe Dufraud, conseguía el trofeo al mayor número de piezas capturadas en una sola jornada con 15 truchas, mientras que Juan Fernández Manso lograba el premio a la trucha mayor de la fase final, 52,2 centímetros si bien en la fase selectiva se habían conseguido mayores piezas. En el cómputo general habría que señalar que la edición de este año ha quedado por debajo de la anterior en número de capturas.

Tal vez la climatología adversa con fuertes tormentas, haya tenido la culpa, pero tal vez haya que achacarlo a que los ríos, por desgracia, se encuentran cada vez peor pese a que los escenarios elegidos son, en teoría, los mejores. En todo caso la ausencia del Pablo Castro Pinos, que en estos momentos compite en el mundial de Finlandia, había dejado abierto un concurso que va perdiendo fuelle en cada nueva edición.

Entre muchos aficionados que participan año tras año en la Semana Internacional comienza a debatirse la idea de que tal vez habría que cambiar las fechas. Parece claro que junio, salvo años climatológicamente raros como éste, es el mes que ofrece mayores garantías para pescar en la provincia, pero siempre refiriéndonos a los ríos naturales, no regulados por pantano. Dado que el concurso se celebra en el Órbigo y en el Porma, ambos regulados, el mes de septiembre podría resultar francamente mejor. Otra opción también sería el Esla. No cabe duda de que, hoy por hoy, es el río que permite señalizar los mejores tramos, tanto en longitud como en variedad. Hace tres años, y ante los desastrosos resultados que se producían, se le sustituyó por el Órbigo, pero son muchos los pescadores que siguen prefiriendo el Esla. Además, si bien es cierto que temporada ordinaria se pesca mal a mosca, no lo es menos que, cuando finaliza la temporada de riegos y se reduce el caudal, la situación cambia radicalmente, pescándose muy buenas truchas con fuerza y tamaño para disfrutar.

La Junta de Castilla y León, a través de la Consejería de Medio Ambiente, realiza un importante esfuerzo tanto económico como a nivel de medios humanos. La cuota que pagan los participantes, 110 ¿ en esta edición, no cubre ni de lejos los gastos ocasionados.

En todo caso el fin que se persigue es promocionar un deporte y una actividad turística importante para León. En este sentido tal vez cabría considerar la conveniencia que la organización se abriese a la sociedad creando un comité organizador en el que estuvieses presentes, junto con la Administración, los pescadores a través de sus representantes y otras Instituciones también representativas de la vida social y económica de la ciudad y provincia de León. Parece claro que el voluntarismo no es suficiente y que, y esto es una evidencia, la Semana Internacional languidece año tras año